El PP de Mallorca reclama al Gobierno central una regulación más justa de los medicamentos veterinarios

Los populares presentan una moción en el Pleno de abril para instar al Gobierno español a garantizar el bienestar animal y facilitar el ejercicio profesional del sector

La iniciativa ha sido consensuada con el Colegio de Veterinarios de las Islas Baleares, con quienes el PP ha mantenido reuniones para escuchar de primera mano las necesidades y dificultades que afronta el sector ante la actual normativa estatal

El Partido Popular de Mallorca ha registrado una moción que se debatirá en el Pleno de abril del Consell Insular con el objetivo de apoyar al colectivo veterinario y reclamar al Gobierno de España una reforma urgente de la normativa que regula la prescripción y uso de los medicamentos veterinarios. Según los populares, la regulación actual supone una carga burocrática inasumible y pone en riesgo tanto la salud y el bienestar de los animales como la salud pública.

Esta moción, que ha sido elaborada y consensuada con representantes del Colegio Oficial de Veterinarios, reclama una revisión del Real Decreto 666/2023 y de la Ley de Garantías del Medicamento para garantizar que los centros veterinarios puedan dispensar los tratamientos completos, como ya ocurre en la mayoría de países europeos. También solicita una moratoria en el uso obligatorio de la plataforma PRESVET hasta que funcione correctamente, y la reducción del IVA del 21% que actualmente grava los servicios veterinarios.

“El PSOE ha impuesto una normativa que no escucha a los profesionales y que solo genera obstáculos. Es una muestra más de su desconexión con la realidad”, ha afirmado el portavoz adjunto del grupo, Bernat Vallori.

Desde el PP defienden que los veterinarios son una pieza clave del sistema sanitario y denuncian que, además de la falta de medicamentos disponibles en farmacias, se les somete a un régimen sancionador desproporcionado. “El Gobierno central debe rectificar. No se puede legislar desde despachos en Madrid sin entender qué ocurre en las clínicas veterinarias de pueblos y ciudades. Si queremos proteger el bienestar animal, debemos proteger también la libertad y capacidad de actuación de quienes lo garantizan cada día”, ha concluido Vallori.